All the single ladies, if you like it put a ring on it… ya sabes lo que dicen chasquea los dedos y… oh oh oh oh sabes lo que dicen (gracias): de los 19.999.999 millones de hombres que hay en España, con un porcentaje razonable de ancianos, uno de niños y otro de gays asombrosamente buenorros, alguno tendrá lo que buscas. Y lo mejor de ser morena, universitaria y estar zumbada es que el afortunado te va a buscar a ti, los demás se irán tachando del censo electoral poco a poco.

En realidad todo pasa por una razón, para darte cuenta de que estás justo donde querías estar y la vida es tan corta que preocuparse de cómo solucionar es tan triste que creo que tardaría más en aprender a cocinar que en vestirme, saltar y disfrutar. La pregunta no es por qué no se debe, la buena pregunta es quién no va a querer.

Un paso, y otro y otro más, recuerda cuando pensaste que aquello jamás iba a pasar y también cuando sentías que aquello otro tampoco se iba a pasar, ahora reflexiona un segundo ¿qué contestas? Vaya es verdad, todo pasó. Lo mejor de todo es que siempre utilizo la metáfora de la cocina porque me sirve para comparar algo tan duro para mí como es dar el paso de hervir a freír y eso es precisamente lo más maravilloso, que cocinar es lo más difícil que jamás tendré que hacer y lo más gracioso es que cuando me ponga lo voy a conseguir.

Sabes qué es lo que te distingue, es una capacidad innata para quererte a ti misma más que a todo lo demás. Ahora no lo ves, ni mañana tampoco lo verás, ni si quiera sabes que tú misma eres así, pero sobretodo no te trates como a todo lo demás del mundo porque tú no eres ese tipo de mujer. Eres de la clase que un día quiere algo imposible, nadie sabe cómo es humanamente posible que vayas a conseguirlo, pero cuando quieres darte cuenta tienes un gran asterisco junto a tu nota de Barroco. Oh el apocalipsis y resulta que es todo lo contrario, que el cielo se ha abierto una vez más para hacerte feliz y para que todo el mundo diga: “Joder ya lo ha logrado otra vez”.